Escritor contemporáneo nacido en Oviedo el 28 de abril de 1889 en modesto hogar de artesanos, hijo de don Francisco Cruces Robles y doña Rosario González Alvarez, de Cangas del Narcea él y ovetense ella.

Trasladado con sus padres a Gijón a los pocos meses de nacido, en esta villa ha transcurrido su existencia y se desarrollaron todas sus actividades y facultades, por lo que se le considera como gijonés de nacimiento.

Aunque dotado de vocación y aptitudes para el estudio, reveladas al cursar la enseñanza elemental y confirmadas durante la segunda enseñanza en el Instituto de Jovellanos, la posición económica de los padres no consentía los dispendios de darle una carrera, por lo que hubo de renunciar a los estudios oficiales. De famlia en que los hombres se dedicaron preferentemente a las artes gráficas, llegada la hora de escoger oficio, se encontró con espontánea inclinación al de ellos. Su padre era maquinista impresor, y con él se inició en el trabajo de imprenta, que habría de servirle, como maquinista y como tipógrafo, para la defensa en la lucha por la vida en adelante. Trabajó desde entonces en diversas imprentas gijonesas.

También recibió del padre otra inclinación de orden espiritual, de la que estuvo siempre asistido sin cansancio: el amor a la lectura y un afán desmedido por escudriñar en el fondo de todas las cosas, que ha hecho del que no pudo ser estudiante un estudiante a perpetuidad.

La vocación a la lectura le ha llevado, ya hombre, al estudio a fondo de varias disciplinas de especulación mental que son como los cimientos del humano saber: Metafísica, Filosofía, Historia, Sociología, Derecho, Astronomía… y como fruto del estudio y la propia especulación surgió el publicista con una producción todo lo abundante que pueden permitir esas materias tratadas seriamente.

Además de los diversos trabajos anotados al pie del presente estudio, ha escrito para diversos periódicos, entre los que cuentan El Noroeste, de Gijón, y Heraldo de Madrid, entre otros, editados en diferentes lugares de Asturias.

También fundó y dirigió en Gijón Luz (1927) y La Protesta (1932), en los que ha colaborado copiosamente. Sus trabajos periodísticos los ha firmado regularmente con seudónimos, entre los que se pueden citar como más usados los de Volter, Platón, Psiquis, Licurgo, Pelayo Astur, Asteroides, Doctor X, Dracón, Diógenes Laercio y Uno de la Historia.

Obras publicadas en volumen:

 

I—Dictámenes de seis sabios. (Gijón, …; folleto.)

 

lI.—Las grandes hembras. (Gijón;. )

 

III.—Metafisica universal, (Gijón)

 

IV.—La Vida y el Hombre, (Gijón, 1922.)

 

V.—Cajal y… un rebelde. (Gi¡Oña

 

VI.—Divino ramillete. (Gijón, …)

 

VII. —Pensamientos de un sabio. (Gijón, …)

 

VIII.—Penología. (Gijón, …)

 

IX.—¿Qué es Derecho? (Gijón, 1928; con prólogo de Julián Ayesta.)

 

X.—El origen de las falsedades históricas, (Gijón, …)

 

XI—El Sindicalismo ante la Historia y la Ciencia. (Gijón, 1933.)

 

XIL—D. Miguel de Unamuno y un servidor, (Gijón, …)

 

XII.—Los videntes esquizoides. (Gijón, 1934; opúsculo.) 

 

Trabajos sin formar volumen:

 

1.—Mi amigo y noble comentario crítico. (En Luz, Gijón, 26 de noviembre de 1927; contestación polémica a Ensayo sobre un nuevo concepto metafísico de la Biogénesis, de don Andrés González Muñiz, publicado en el mismo número del periódico.)

 

2.—Para Andrés González Muñiz. (En ídem, 12 de diciembre de 1927; ídem.)

 

3.—El Sol. (En ídem, 20 de diciembre de 1927.)

 

4.—La inmortalidad de la Rémora. (En ídem, 30 de diciembre de 1927.)