Músico y compositor musical contemporáneo, residente en América desde hace unos seis lustros.

Nació en Mieres el 2 de julio de 1880, hijo de don Ramón Fernández, herrero-forjador en la Fábrica de Mieres, y doña Emilia Martínez, que ejerció muchos años de comadrona sin título en esa villa.

A los diez años de edad, con cuatro de asistencia a la escuela pública de la villa natal, fué preciso que abandonara los estudios para ayudar con su trabajo al sostenimiento del hogar paterno, poblado por nueve hijos. Entró entonces como aprendiz en el taller de fundición de la citada fábrica, dedicando las noches a asistir a las clases que daba el capataz facultativo de minas don Atanasio Rodríguez de preparación para el ingreso en la Escuela de Capataces de Minas, Hornos y Máquinas. Y cuando ya estaba preparado para el ingreso en dicha Escuela, donde ingresó fué en la academia de solfeo que sostenía don Jenaro Palacios, director entonces de la Banda Municipal de Mieres, llevado por su vocación musical, sentida hondamente desde la infancia.

Al poco de comenzar sus estudios musicales, formó parte de la Banda, en la que llegó a tocar el clarinete con maestría, no obstante sus pocos años.

Al cumplir los diecisiete, “en mi afán de progreso y con la cabeza llena de ilusiones—dice él mismo—un buen día me escapé de la casa de mis padres tomando el tren hasta Valladolid, donde conseguí ingresar en el Regimiento de Toledo número 35 como voluntario por cuatro años, los cuales cumplí y aproveché lo mejor que pude, Pero no como yo hubiera deseado. Después de pasar mis primeros tiempos en el cuartel, la misma repugnancia que me causaba la rígida disciplina militar de entonces, por las muchas tropelías y abusos que se cometían con los soldados, llegué a tomarle asco a todo y, lejos de aprovechar las horas libres para estudiar, más bien las empleaba en pasear y esparcir los malos ratos que pasaba en el cuartel”.

Después de licenciado regresó a Mieres, y obtuvo un empleo en la Cooperativa de la Fábrica, llegado al poco tiempo a ser jefe de una de las sucursales, con lo que adquirió una práctica de escritorio y mostrador que habría de aprovecharle más adelante. Al mismo tiempo volvió a formar parte de la Banda Municipal, y atento siempre a su gran vocación lírica, organizó poco después el Orfeón Socialista, que dirigió por espacio de cuatro años, pasando luego a dirigir el Orfeón Mierense, con el cual obtuvo un éxito resonante en el Certamen de Orfeones celebrado en Gijón en 1906, en el que ganó el primer premio con la interpretación de una obra de libre elección. Por esta época y con destino a las masas corales por él dirigidas, compuso sus primeras obras musicales, anotadas más abajo en obras inéditas, con letra de algunos escritores socialistas, como Manuel Vigil Montoto, Manuel Llaneza, José la Fuente y Luis Miranda. Por entonces ya se había establecido con hogar propio en la villa natal, casado en Villarejo (Mieres) el 14 de abril de 1904 con doña Amalia García Álvarez.

Deseoso de un medio más propicio a su prosperidad económica, en el citado año 1906 emigró a la Argentina. Desde entonces, sin abandonar sus actividades de músico y compositor, sino cultivándolas con entusiasmo y fecundidad crecientes, vivió dedicado a ocupaciones de carácter comercial, en tareas de contabilidad y administración, para lo cual empezó por aprender la Teneduría de Libros por partida doble. En Rosario de Santa Fe (Argentina), donde residió algunos años, fundó el Orfeón del Centro Asturiano bajo su dirección, con lo que contribuyó grandemente a despertar y mantener la afición al canto y la música en esa ciudad. Residente más tarde en Asunción (Paraguay), fundó el Orfeón del Centro Español, que también dirigió con aciertos públicos.

Desde 1917 vive radicado en Magallanes (Chile). Dedicado en los primeros años a su profesión de tenedor de libros, consiguió independizarse en 1925, y actualmente administra un establecimiento de tostar café, de su propiedad. Como en las otras ciudades de su residencia, en Magallanes ha continuado dedicando a la música y el canto lo mejor de su espíritu, como ejecutante, compositor y director de grupos Corales. Fundó y dirigió primero el Orfeón del Centro Español y luego el que adoptó como título el nombre de la escritora Gabriela Mistral, con los cuales ha obtenido brillantes éxitos en numerosos Conciertos benéficos y puramente artísticos, dándole esta labor admiración y prestigio, por lo que ha redundado en provecho de la cultura Musical Popular.

Vinieron a robustecer su reputación en 1926 dos primeros premios, obtenido uno de ellos en un concurso de himnos dedicados a la Fiesta de la Primavera, y otro en unos Juegos Florales celebrados en honor del Presidente de la República con la canción A la reina, letra y música suyas. Ambos certámenes tuvieron lugar en Magallanes. Dos años después (1928) se le nombró por el Gobierno chileno Profesor de Canto y Música del Liceo de Hombres de esa misma ciudad, cargo que dejó en 1930 para dedicarse mayormente a negocios comerciales. 

Obras publicadas en volumen:

I y II.—Obras para orfeón: Los pescadores y La foguera. (A cuatro voces.)

III al XI—Canciones: Celosa, Nido de amor, La oda de sus ojos, Ilusión, Pajarillo, Aquellos ojos, Canción rotaria, Canción de juventud y Canción de cuartel, (Esta última adoptada por varios regimientos de Chile.)

XIl al XX. — Tangos-canción: Noches de luna, Son dolores, NO pierdas tiempo, Nicanor, Vejestorio, No puedo olvidarte, Irinie, y me dejó y Destino. (Este último con letra suya.)

XXI al XXXII. — Himnos: A Prat, A la primavera, A la escuela, A la Cruz Roja, Al profesorado, Himno rotario de Magallanes, Himno del Colegio Don Bosco, Himno del Colegio San José, Himno del Liceo, Himno Legión Cívica de Magallanes, Himno Sociedad La Araucana, Himno Sociedad Tiro al Blanco e Himno Sociedad Deportiva-Natales.

XXXIV al XLIV. — Pasodobles: Torontel, Mantones y mantillas, Barquillo, Centinela, Al fin solos, Asturias, Rotary, Anti-grippe, BoyScout, El hortera, Tijeras y navajas,

XLV. —Primorosa. (Habanera.)

XLVI. — Motivos asturianos.(Composición para orquesta.)

XLVII.—Un marciano en Punta Arenas, (Revista con letra de José Kramarenke, estrenada en el Teatro Municipal de Magallanes.)