Maestro de instrucción pública y escritor contemporáneo. Nacido en hogar humilde de Cedemonio (Illano) el 2 de diciembre de 1860, hijo de don Antonio de esos apellidos y doña Carmen Martínez.

Estudió la enseñanza elemental en la escuela pública de Dorias (Boal), y después una gran vocación hacia el ejercicio de la enseñanza tropezó con dificultades económicas punto menos que invenCibles para seguir los correspondientes estudios, por lo que hubo de hacerlos con grandes sacrificios hasta que en 1878 obtuvo certificado de aptitud mediante examen y se le concedió la escuela de Gio y Cedemonio, que tuvo a su cargo y regentó con gran dedicación hasta 1881, en que vino a interrumpirle en el ejercicio el cumplimiento del servicio militar. 

Sirvió al Ejército en el regimiento del Príncipe, en el cual obtuvo la graduación de cabo, y licenciado al año siguiente (1882), volvió a la profesión de maestro en la escuela de Prelo (Boal). A la vez que enseñaba proseguía sus propios estudios en la escuela normal de Oviedo. En ella cursó como alumno libre el primer curso En 1884, y como alumno oficial el siguiente. Por entonces, desde el 4 de noviembre del 84, estaba ya casado con doña Justa Santa Eulalia Villamil, y de cuyo matrimonio desciende José Alberto Fernández Jardón, reseñado más adelante.

El recuerdo de buen maestro que dejó en ese concejo muchos años después a la Sociedad Naturales del Concejo de Boal, de la Habana, a pedir ese municipio que se le declarara hijo adoptivo, lo que se llevó a cabo oficialmente, mientras ella le concedía el título de socio de honor.

Regentó después la escuela de Santa Eulalia de Oscos, donde dejó también un perdurable recuerdo por sus afanes de educador y servicios ciudadanos. Entretanto, después de obtenido el título de maestro elemental, continuó sus estudios y obtuvo el de maestro superior, con nota de sobresaliente, el 2 de octubre de 1890.

Por esta época comienza a afirmarse su personalidad con nombre respetable, a lo que contribuyen sus actividades de escritor, ejercitadas con la publicación de algunos libros de texto escolares y colaboraciones en periódicos ovetenses de ideología tradicionalista, como La Cruz de la Victoria, y profesionales, cual El Naranco.

Después de regentar algún tiempo la escuela de Cerdeño, próxima a Abulí, en el concejo de Oviedo, pasó a la de esta capital enclavada en el distrito de la Luneta, al frente de la que estuvo varios años.

Favorecido desde su establecimiento en Oviedo por un medio más amplio y propicio para desenvolver con mayor brillantez su personalidad, a las actividades de escritor con colaboraciones en La Opinión de Asturias, El Carbayón, Las Libertades y otros varios periódicos vino a juntarse la de conferenciante, con la que alcanzó algunos éxitos sobre temas pedagógicos. Los galardones y los honores le llegaron entonces con alguna frecuencia: una medalla de oro y plata en la Exposición de Logroño celebrada en noviembre de 1897, y otra de cobre en la de Gijón de setiembre del 99; las condecoraciones de caballero de la Orden de Isabel la Católica en junio de 1900 y de la Orden de Alfonso XII en febrero de 1904; nombramiento de socio honorario de la Liga de Educación Nacional, de Madrid, en febrero de 1906, y diploma de gratitud en abril de 1901 y nombramiento de socio numerario en agosto de 1906, conferidos por la Cruz Roja Española, entidad que muchos años después, en noviembre de 1927, le había de Conceder medalla de segunda clase.

En esa época, siempre celoso de enriquecer y perfeccionar sus conocimientos pedagógicos, se hizo maestro normal (1904) en la Escuela Central de Madrid.

Continuó en Oviedo en el ejercicio de la enseñanza, hasta que por oposición ocupó el 22 de octubre de 1908 el cargo de secretario de la Junta Provincial de Instrucción Pública, del que pasó tiempo después a jefe de la Sección Administrativa de Primera Enseñanza y en el cual ha sido jubilado por cumplimiento de la edad reglamentaria el 2 de diciembre de 1930.

Alternados con esas funciones de carácter administrativo, desempeñó algunos otros cargos de diversa índole. Fué profesor auxiliar sin retribución de la Sección a Ciencias de la Escuela Normal durante los cursos de 1911 a 19135 vocal de la Junta Provincial de Beneficencia desde diciembre de 1917 hasta la reforma de este organismo por la dictadura de Primo de Rivera en abril de 1926, y concejal del Ayuntamiento de Oviedo, por designación, bajo ese régimen político, desde 1924 hasta la caída del dictador en 1930.

En estos últimos años sus actividades de escritor han sido menos fecundas. Entre los periódicos donde ha colaborado figura El Progreso de Asturias, de la Habana desde su fundación en 1919.

 

 Obras publicadas en volumen: 

I.—Nociones de Religión, con arreglo al programa de esta asignatura explicada en la Escuela Normal de Maestros de Oviedo (Luarca, 1892; obra premiada en la Exposición de Logroño en 1897, declarada de texto en 1900 y reeditada en 1908.) 

II.— Nociones de Historia sagrada. (¿Luarca, 18932; ídem id.; la tercera edición, de 1910.)

lII. — Colección de problemas aritméticos. (¿Llanes, 18957; obra en colaboración con Francisco Mijares, premiada en la Exposición celebrada en Gijón en 1899.)

IV.—Medios de educación moral y religiosa. (Oviedo, 1930; folleto)

 

Trabajos sin formar volumen:

1.— La doctrina de Jesucristo. (En La Opinión de Asturias, Oviedo, conferencia, en folletín.)

 

Referencias biográficas:

Anónimo. — Por el magisterio asturiano: Don Francisco F. Jardón. (En El Naranco, Oviedo, 25 de octubre de 1908.)