Maestro de instrucción primaria y escritor contemporáneo, fallecido, al que dieron una sólida reputación su método de enseñanza, su excelente conducta y sus diversos libros de texto, algunas varias veces reeditados. Fué maestro de dos generaciones en Mieres y preparó para carreras universitarias a muchos mierenses que luego brillaron en diferentes campos del saber y del trabajo.

Nació Fernández de la Losa en la aldea de Landeloso, de la parroquia de Valdecuna (Mieres), y no en el concejo de Allande como se ha escrito en algún sitio, el 15 de julio de 1862. Fueron sus padres don Juan Fernández Prieto y doña Apolonia de la Losa, labradores de posición desenvuelta y distinguidos en el concejo.

Dotado de notables aptitudes para el estudio y siguiendo los impulsos de su más firme vocación, cursó la carrera de maestro que remató con el título de maestro superior de Primera Enseñanza en 1882, alcanzando la calificación de sobresaliente en el examen de reválida, comenzó a ejercer la profesión como maestro auxiliar en Mieres hasta que, poco tiempo después, ganó por oposición la escuela de Pola de Allande. Por oposición también, de ésta pasó a la de Grandas de Salime y más tarde a la de Mieres, meta de sus aspiraciones y en la villa de Mieres, que él consideraba como el verdadero lugar de nacimiento por los muchos recuerdos que de ella guardaba de la infancia y la juventud, residió por espacio de más de cuarenta años consagrado a la enseñanza con el más hondo fervor y la más dispuesta capacidad, reconocidos por todos. Allí constituyó su hogar, casado con la también maestra superior, ovetense de nacimiento, doña Rafaela Cabeza Fernández, el 25 de agosto de 1889, y allí, sin desmayo ante las contrariedades y las apreturas económicas, desplegó los máximos esfuerzos en instruir a los hijos de los vecinos y estimular a éstos a dotarles de estudios superiores, apoyando el estímulo con el ejemplo propio, Pues to que dió a todos sus hijos carreras universitarias o especiales: Dotado de cultura superior a la corriente en un maestro de instrucción primaria, que procuraba enriquecer con el constante estudio, desarrolló actividades de profesor, y con él continuaron algunos de sus discípulos estudios de segunda enseñanza, universitarios y de preparación para oposiciones. 

Fué subdirector del Liceo Mierense e inspector de las escuelas municipales del concejo. También figuró entre los fundadores y profesorado de la Universidad Popular de la misma villa y prestó entusiasta colaboración en ella a la cruzada de difusión cultural desarrollada por la Extensión Universitaria.

Sus afanes de progreso de Mieres y de Asturias y el amor acendrado que profesó siempre a la región le estimularon a cultivar las letras desde el comienzo de su ejercicio profesional en periódicos asturianos, especialmente ovetenses. Fué colaborador de El Carbayón, La Opinión de Asturias y otros. En el primero comenzó a escribir pocos años después de su fundación (1884). También publicó algunos trabajos en la revista de Oviedo La Institutriz (1888). Más tarde extendió sus colaboraciones a varios periódicos de fuera de la Provincia, entre ellos El Cantábrico, de Santander, y El Globo, de Barcelona. Los temas pedagógicos acabaron por ser los preferidos de su pluma, especialmente los relacionados con el mejoramiento de la enseñanza primaria y la defensa de los intereses materiales, y morales del magisterio, y en algunas de las citadas publicaciones y en otras profesionales publicó trabajos que le merecieron alabanzas.

Solía emplear en ocasiones como firmas literarias las de Pepe y Losa.

El escritor y el maestro que había en él se propusieron mejorar los libros de texto escolares, y fruto de este empeño fueron las varias obras que se anotan más abajo, algunas de ellas repetidamente impresas. Con algunos de estos libros alcanzó diplomas y medallas en exposiciones y certámenes.

Después de jubilado reglamentariamente como maestro nacional, pasó a residir al lado de sus hijos en Valladolid, donde falleció el 25 de abril de 1933. Su cadáver fué trasladado a Mieres e inhumado en el cementerio de esta villa, tan amada por él.

Obras publicadas en volumen:

I.—Nociones de Gramática española. (Oviedo, …; la segunda edición en 1895.)

lI.—Nociones de Aritmética. (Oviedo, 1896.)

III.—Rudimentos de Fisiología e Higiene. (…).

IV.—Rudimentos de Historia de España. (…).

V.— Rudimentos de Derecho: (…)

VI.—Rudimentos de Historia natural. (…)

VII.-—Rudimentos de Física y Química. (…)