Oscura personalidad que ha dejado escasos rastros de su vida. F. Canella y Secades, en la monografía Colunga de la obra Asturias, dirigida por él y Bellmunt, dice lo siguiente: “Excelente literato y humanista bien conocido por sus traducciones y las eruditas palabras con que las adornó.”
Nacido en Lastres (Colunga), o en el término de esta villa, antes de mediar el siglo XVIII. Además de traductor e ilustrador de sus traducciones, parece que ha producido obra original. Floreció en tiempo de Carlos III, en Madrid, donde llegó a ocupar cargos importantes, como el de inspector del Colegio de Sordomudos. Figuró entre las personas de amistoso trato con el ministro de Carlos IV, don Manuel Godoy. Fallecido en Burdeos en la miseria.
Por error o errata se ha escrito su apellido Alcalá, por algunos, en lugar de Alea.