Presbítero y escritor de fines del siglo XIX y comienzos del XX. Ya ordenado de sacerdote, continuó los estudios teológicos hasta graduarse de doctor.
Desde estudiante se dió a conocer ventajosamente como escritor, colaborador de diversos periódicos, y conquistó con la pluma algunos galardones.
Hacia el año 1898 se trasladó a la Argentina, y allí, en agosto de ese año, en el Certamen Literario Hispano-Argentino, obtuvo el primer premio, donado por el arzobispo de Buenos Aires, con el estudio La Iglesia y el Estado.