Maestro de instrucción primaria y pública en la segunda mitad del siglo XIX, reputado por su ilustración y método de enseñanza. Nacido en Proaza, hijo de labradores, el 14 de febrero de 1856.

Cursó en la villa natal las primeras letras con tal disposición y aprovechamiento, que el maestro mismo le dió estudios correspondientes a la segunda enseñanza, dispuesto al logro de aquella inteligencia. Pasó luego como preceptor de los hijos a casa de don José del Manzano, en Las Bárcenas (Quirós). Simultáneamente, cursó los estudios de maestro nacional superior en la Escuela Normal de Oviedo. Ya en posesión del título de maestro, obtuvo mediante oposiciones la escuela de niños de Villanueva (Santo Adriano), que regentó algún tiempo. En esta población celebró esponsales con doña Luciana Cobas Fernández de la Vara y nació su hijo Daniel (1879), ya reseñado también como maestro y escritor. Trasladado poco después a la escuela de La Caseta (La Peña, Mieres), estuvo al frente de ella muchos años, hasta su jubilación

Fué persona que dejó en ese término de Mieres recuerdo perdurable como maestro y convecino. Hombre profundamente democrático, más en los hechos que en las palabras, e íntegramente bueno, se le conocía por “el pan de los pobres”, a los que acogía en sus necesidades con verdadera fraternidad. Con el más acendrado desinterés, les escribía las cartas destinadas a familiares ausentes, les llevaba la contabilidad de sus tratos, les asesoraba en sus dudas y aun los socorría económicamente en la pequeña medida que le permitían las posibilidades modestas con que contaba.

De su ejecutoria como escritor sólo se conoce la obra anotada más abajo, con destino al personal y accionistas de la Fábrica de Mieres.

Fallecido en esta villa, a los setenta y dos años, el 4 de mayo de 1918.

Obras publicadas en volumen:

I.—Manual novísimo de cuentas ajustadas del obrero. (Oviedo, 1899.)