Evoca este nombre el de una prodigiosa inteligencia malograda por la tuberculosis, minadora de un organismo debilitado por el exceso de estudio y trabajo mental.

Nacido en San Miguel de Mohices (El Franco) en 1811 y fallecido 3n 1839.

Estudió la carrera de Derecho la Universidad de Oviedo, en la le obtuvo en 1835 el grado de bachiller en Leyes y Cânones con nota de sobresaliente a Claustro ple, y en ese centro académico fué, la vez que estudiante, profesor auxiliar.
Recordándole su discípulo don José Posada Herrera, años después fallecido Alvarez, decia de él, Fermin Canella y Secades, que suerte había privado “a España ln sabio y a la provincia de una sus mâs brillantes glorias”.
Don Marcelino Fernández y Fernández escribe de él en su monografía El Franco (tomo II de la obra Asturias, dirigida por Bellmunt y Canella): ‘El señor Pérez San Miguel, párroco actual de La Caridad, nos dice que era una inteligencia de primer orden, pues se pasaba las noches enteras estudiando con recursos extremos para que no le rindiese el sueño. Era el alma de la tertulia de abogados y personas de representación que entonces había allí, tales como don Melitón M. San Julián, don Ramón y don José Rosendo Cuervo, de Arboces; don Rosendo Acevedo, de Longora, y otros, principalmente, los militares de alta graduaciôn llamados los Villares, pertenecientes al palacio del Trigal, que se asombraban y complacían todos oyendo a aquel prodigioso joven.”

Dice el citado don Marcelino Fernández que dejô interesantes apuntes y borradores de estudios, que figuraron en la Biblioteca de don Fermin Canella y Secades.