Pintor y escritor contemporáneo nacido en Mieres el 8 de agosto de 1903, hijo de don Ulpiano y doña Inocencia de esos apellidos respectivos
Desde la infancia sintió una gran vocación por la pintura, que no pudieron vencer ni desviar sus padres, deseosos de que poseyera una profesión más lucrativa, dispuestos a costearle una carrera: ingeniero, abogado, médico, la que quisiera estudiar. El sólo quería ser pintor. Aunque hizo los estudios de capataz facultativo de minas en la Escuela de la villa natal, fué contra su gusto. Obligado a desenvolver su afición a hurtadillas, fué de este modo adquiriendo libros y útiles de trabajo y concurriendo a conferencias y exposiciones de arte para proporcionarse el conocimiento técnico del dibujo y la pintura. Le fué necesario llegar a encerrarse en una habitación retirada de la casa paterna, donde ejecutaba en secreto sus obras.
Al fin se pudo dar a conocer y juzgar del público en dos Exposiciones celebradas en Mieres, concurrente en ambas con otro joven pintor y amigo suyo, Estanislao García Canteli, más conocido por Taño Canteli, valiéndoles estas dos exhibiciones de sus cuadros sendos éxitos, certificado el último de ellos con una conferencia de clausura por don Antonio Juan Onieva, director en Oviedo de La Voz de Asturias.
Posteriormente, Antuña expuso frutos de sus pinceles en dos Exposiciones veraniegas del Ateneo Obrero, de Gijón, y en varios Certámenes del Trabajo celebrados en La Felguera, cosechando en tales concursos premios y menciones honoríficas.
A la vez que de pintor ha desplegado actividades de literato y periodista. En el diario ovetense El Carbayón y en portfolios veraniegos de la provincia ha venido siendo un asiduo colaborador. En estas publicaciones ocasionales, el dibujante ha alternado con el cuentista. En aquel diario, además de otros diversos escritos, ha conquistado renombre como cronista de deportes con el seudónimo de Segui.
Ha enriquecido su cultura literaria y artística con numerosos viajes por España hasta conocer las principales poblaciones en su casi totalidad.
En los años 1932-33 tuvo a su cargo en el Instituto de Segunda Enseñanza de la villa natal la cátedra de Dibujo, y posteriormente pasó a desempeñar esa misma y otras disciplinas en la Academia Lastra.