Abogado y escritor contemporáneo, fallecido. Natural de Avilés, donde nació el 7 de marzo de 1846, hijo de don Juan de esos apellidos y doña Isidora Peláez. Dominado por una natural inclinación a la carrera de las armas y preparado para seguir estos estudios, ingresó muy joven en la Academia de Artillería de Segovia, siendo uno de los alumnos que corrieron el peligro del incendio voraz que en marzo de 1862 destruyó una buena parte de este bello edificio – fortaleza. Convencido pronto de que no era ésa su verdadera vocación, abandonó la Academia militar y cursó los estudios de la Facultad de Leyes de la Universidad de Valladolid, en la que fue investido de licenciado en Derecho Civil y Canónico.
Por los años anteriores y posteriores a la revolución de septiembre de 1868 militó como uno de los elementos más activos y entusiastas en las filas republicanas de la ciudad y fue presidente de la Juventud Republicana constituida allí.
Hombre de muy despierta inteligencia y dotado de gran afán por el estudio, acopió una extensa ilustración general, afirmada después de concluida la carrera con viajes por el extranjero, especialmente por Francia.
Se estableció más tarde en AviIés, donde tuvo abierto bufete de abogado, que supo acreditar en la defensa de alguna célebre causa en la Audiencia de Oviedo. Tiempo después fue nombrado secretario del Juzgado municipal de esa villa, cargo del que se posesionó el día 9 de marzo de 1880, y dedicado a esa ocupación, bastante retraído de las luchas políticas que le entusiasmaron de joven, vivió muchos años, hasta su fallecimiento. También ejerció durante algunos años de profesor de Historia en el Colegio de la Merced, de segunda enseñanza, dirigido por don Domingo Álvarez Acebal. Ese retraimiento suyo lo llevó al extremo de no haber querido aceptar distinguidos cargos políticos que le fueron ofrecidos.
Según nos comunica su sobrino don Froilán Vázquez, se hizo cónsul del Paraguay, solamente por tener a buen recaudo documentos y correspondencia que sería peligrosa en aquellos tiempos de persecuciones a toda idea liberal.
De sus actividades de escritor, que tal vez fueran copiosas, solo sabemos que ha colaborado en algunos periódicos avilesinos liberales (liberales, entonces), tales como el semanario La Luz de Avilés y el Diario de Avilés, sucesor del primero desde 1890. Sus temas predilectos eran los histórico-sociales.
Falleció don Froilán Arias Carvajal en Avilés el 5 de diciembre de 1923.