Religioso agustino y escrito: contemporáneo, fallecido. Nació en Manzaneda (Oviedo) el 29 de noviembre de 1854. Despertada su vocación religiosa en los primeros años de la vida, después de hecha la instrucción primaria, se dejó llevar por esa inclinación e ingresó en el Colegio establecido por la Orden de San Agustín en Valladolid, en el que tomó el hábito el 9 de noviembre de 1871 y comenzó los estudios de la carrera eclesiástica. Continuó luego éstos e hizo los votos de profesión solemne en el convento de La Vid (Burgos), en 1874.
Un año después le destinaron los superiores, siguiendo la costumbre adoptada por la Orden, a las misiones establecidas en Filipinas, antes de terminar la carrera. La concluyó en Manila en 1878. Luego residió algún tiempo en Dumangas (isla de Panay), hasta aprender el idioma de los aborígenes e imponerse de sus costumbres y de las prácticas misioneras. Seguidamente regentó en calidad de ecónomo la parroquia de Otón, desde 1882 hasta 18809, señalándose este gobierno suyo como provechoso al bien público y bajo el cual. con su dirección y estímulo, se erigió uno de los mejores templos del archipiélago.
Posterior y sucesivamente fué cura párroco de Alimodían, San Miguel y Borotac Viejo hasta 1893, fecha en que regresó a España, designado Procurador en el Colegio sostenido por la Orden en Mallorca. Cumplido este mandato, tres años después volvió a trasladarse a Filipinas, y durante esta nueva permanencia en el archipiélago regentó el pueblo de Patnongon, hasta que la insurrección contra el dominio español le obligó a huir, como a los demás religiosos establecidos en la isla de Panay, a refugiarse en Manila (1898).
“Atendiendo a sus cualidades especiales-—dice Fr. Gregorio Santiago Vela, a quien seguimos en esta información-—para el gobierno y contando con su actividad y ‘ energías manifestadas en otras empresas, se le confió el establecimiento de la Orden en el Brasil, y, nombrado vicario general de los religiosos que se le encomendaron, partió de Filipinas para España en 1899, y de aquí para dicha República, adonde aportó el 17 de junio del mismo año.”
Su gobierno en estas misiones de nueva creación en tierra brasileña fué de lo más acertado a los fines religiosos y educativos perseguidos por la Orden y al progreso social de las comarcas que recibieron esa influencia. Poco después, en 1900, extendió esas actividades a la República Argentina, donde fundó misiones y colegios de la Orden en las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe y en la diócesis de La Plata. Su última iniciativa consistió en la Fundación Unzné en Buenos Aires, con iglesia y colegio bajo la advocación de San Agustín, pero que no llegó a ver concluida por haberle sorprendido la muerte.
Durante esta permanencia en tierras americanas dió pruebas de grandes dotes de gobierno y administración, realzadas por sus demostraciones de actividad intelectual con la publicación de diversos trabajos literarios. Tal inteligente actividad la reconoció la orden premiándole con los honores de ex provincial.
Falleció el P. Joaquin Fernández en Buenos Aires el 14 de octubre de 1910.
Obras publicadas en volumen:
I.—La Orden de San Agustin. Demostración de su existencia en la República Argentina, y refutación al Dr. Evaristo Casariego, diputado a la Legislatura de Entre Ríos, (Buenos Aires, 1903.)
lI.—La Virgen del Consuelo Y Correa de San Agustin. Memoria de la restauración de su culto en la República Argentina. Origen que tuvo la correa de San Agustin. Milagros realizados por su intervención. Indulgencias que se ganan y deberes que se contraen. (Buenos Aires, 1906; contiene el volumen trabajos de otros frailes agustinos.)
IlI.—Recuerdo de la colocación de la primera piedra de la iglesia y colegio de San Agustín el 12 de Octubre de 1907. (Buenos Aires, 1807; con otros frailes agustinos.)
Referencias biográficas:
Martínez (Fr. Bernardo). — Un estudio biográfico. (En el tomo XXVIII de la revista agustiniana Madrileña España y América.)