ESCRITORES Y ARTISTAS ASTURIANOS

ÍNDICE BIO-BIBLIOGRÁFICO

FERNANDEZ GARCIA (Manuel)

Escritor contemporáneo, fallecido prematuramente, distinguido por su vena humorística, más conocido por el seudónimo de Vulcano. Nació en hogar modesto de Serantes (Tapia) el 13 de setiembre de 1888.

Después de completar con lecturas la escasa ilustración que le proporcionó la instrucción elemental, única adquirida, y de hacer frente a la vida con diversos menesteres, consiguió una plaza de factor de la Compañía de Ferrocarriles del Norte de España, que desempeñó por espacio de algunos años.

Residente Con ese empleo en Avilés, se dió a conocer como escritor festivo en castellano y en bable en la prensa local, el diario La Voz de Avilés y el semanario El Progreso de Asturias, en los que empleaba casi siempre el seudónimo de Vulcano y algunas veces el de Manin de Teverga. También escribió posteriormente en otros periódicos de la provincia, entre ellos La Voz de Asturias.

Escribió en colaboración con Luis Vergniory— nos dice Luis M. Alonso (Lumen) — la comedia teatral de costumbres asturianas, en un acto y tres cuadros, en prosa, titulada Amor de aldea, que fué estrenada con éxito en el Teatro Iris (Avilés) la noche del 2 de mayo de 1918, representando uno de los papeles principales el propio vulcano, que alcanzó UN triunfo personalísimo. Antes y posteriormente se distinguió en la interpretación de personajes asturianos como actor cómico de verdadero talento. Esta obra, muchos años después, fué representada (verano de 1931) en Mieres, Turón y otras localidades, alcanzando el mismo éxito que en la noche del estreno.

Algunos años después formó en Avilés su hogar propio, casado en Gijón con la señorita avilesina Lucía Soto Sáiz, en 1923. La vida del hogar le alejó algo del cultivo de las letras, por lo menos como escritor festivo, dedicándose a escribir sobre cuestiones ferroviarias en los periódicos La Lucha y Vía Libre, con el seudónimo de Juan de España y también con su nombre y apellidos.

“En las postrimerías de la dictadura de Primo de Rivera—dice el citado Lumen—se significó como un fervoroso republicano, y en la prensa y en la tribuna realizó campañas contra ese régimen Oprobioso. Implantada la República, fué de los desencantados ante la lentitud revolucionaria del Gobierno y las trabas de la oposición de Lerroux, colaborando contra esto en La Tierra, de Madrid, y otros Periódicos, aunque muy brevemente, porque su salud estaba ya muy quebrantada.”

Con el deseo de reponerse de tales quebrantos se trasladó a Madrid; pero el resultado fué negativo y dejó de existir en un sanatorio el 19 de enero de 1934.

 

Obras inéditas:

—Amor de aldea. (MS. Comedia en prosa de costumbres asturianas, en un acto y tres cuadros, en colaboración con Luis Vergniory, estrenada en Avilés el 2 de mayo de 1918.)