Escritor contemporáneo, fallecido. “La nota más dominante de su pluma —dice Eugenia Ástur—, así como la de su carácter, fué el humorismo, un humorismo muy asturiano, y tan inseparable de sus escritos que hasta en la investigación erudita deja escapar el comentario humorístico, la apostilla irónica, la frase ingeniosa, en un estilo fácil, libre de toda pedantería o pretensión académica”.

Nació Mario Gómez en Cangas del Narcea el 23 de al 1872, hijo de don José Gómez y López Braña y de doña Manuela Gómez Arteaga.

Estudió la segunda enseñanza en la villa de nacimiento con exámenes en el Instituto de Oviedo, en el que se graduó de bachiller. Después, llevado de la propia vocación, fortalecida por el ambiente familiar y el estímulo del padre, se trasladó a Madrid y en la Facultad de Medicina de San Carlos cursó esa carrera, en la que se le facultó como licenciado en Medicina y Cirugía en enero de 1897.

Inmediatamente de concluidos los estudios se preparó para las Oposiciones al Cuerpo de Sanidad Militar, y el 27 de mayo del mismo año ingresaba en el correspondiente escalafón.

Sus primeros servicios militares, con categoría de médico segundo, los prestó incorporado al segundo batallón del regimiento de Infantería de África, de guarnición en Melilla, donde permaneció hasta agosto del año siguiente (1898), en que se le destinó a la Fábrica de Armas de Trubia. Su destino aquí estuvo interrumpido por espacio de algunos meses del 99 al 900 con servicios prestados en comisión en el Hospital Militar de Valladolid, y que dejó en 1901 por haber sido trasladado al Hospital Militar de Vitoria.

Residente en esta ciudad, su afición al estudio y vocación de escritor dieron el primer fruto con un volumen (número I) conteniendo sus observaciones físico-psíquicas de los reclutas, trabajo que le fué recompensado oficialmente.

Al año siguiente regresó a la tierra natal, como médico en el regimiento del Príncipe, de guarnición en Gijón, destino que dejó meses después, en el de diciembre, para volver a la Fábrica de Cañones, de Trubia.

Esta su nueva permanencia en Asturias la caracterizan, de una parte, sus actividades de escritor con colaboraciones en varios periódicos provinciales y, de otra, los beneficios que Trubia obtiene de sus actuaciones médicas y sociales hasta llegar a considerársele como un benefactor del vecindario y de la población militar, meritorios servicios que años después habían de serle premiados.

De Trubia pasó a la guarnición de Oviedo y luego a la de Pamplona. Aquí publicó otro estudio de carácter profesional (número II) que fué declarado obra de utilidad para el Ejército. Trasladado después a Manresa (Barcelona), dió aquí a la imprenta otro volumen, Reclutamiento militar: Estudio histórico (número III). que le valió en 1911 la Cruz de primera clase del Mérito Militar.

Al iniciarse la guerra de Marruecos en 1909, marchó a Melilla en el mes de julio con el batallón de Cazadores de Reus, número 16. En el descalabro sufrido por las tropas españolas en el Barranco del Lobo, prestó grandes servicios, con riesgo de su vida, en la curación de numerosos heridos, servicios que le fueron recompensados.

Regresó en el mes de diciembre de ese mismo año a la península, y prestó servicios en el regimiento de Wad-Ras destinado en Leganés (Madrid), hasta que en enero de 1912 marchó nuevamente a Melilla con esta tropa. En esta plaza africana permaneció hasta que, ascendido por antigüedad a la categoría de médico mayor en noviembre de 1914 se le destinó como director al Hospital Militar de Vigo.

Permaneció al frente del Hospital de Vigo hasta enero de 1917, fecha en que se le destinó a la dirección del Hospital Militar de Carabanchel (Madrid). Poco después pasó al Ministerio de la Guerra, coincidiendo esto con su ascenso en junio de 1918 a comandante-médico, como consecuencia de la reorganización del Cuerpo. En dicho ministerio desempeñó importantes funciones. En 1931, proclamada ya la República, Marío Gómez se retiró voluntariamente del servicio activo con más de treinta y cuatro años de permanencia en el ejército.

Durante esta última etapa de su vida, tanto el escritor sobre temas históricos como el costumbrista, dieron lo mejor de sw obra. En los volúmenes publicados en diferentes ocasiones (números IV, V y VI) coleccionó crónicas, poesías, cuentos y pasos de comedia. Y en los volúmenes VI y VII hace historia del pasado remoto de Cangas del Narcea, dando pruebas evidentes de buen historiador, aunque pueda reprochársele haberse dejado llevar en algunos momentos por la sugestión de lo legendario con preferencia a lo rigurosamente histórico.

Unido siempre por fuertes vínculos sentimentales a la villa de nacimiento, por lejos de ella que se encontrara, vivió atento a promover cuanto pudiera redundar al progreso material y moral de esta población y su comarca. De ello dió la prueba más fehaciente con la fundación en 1925 de la agrupación Tous pa Tous, Sociedad Canguesa de Amantes del País, y de su órgano periodístico, la revista La Maniega, que comenzó a publicarse en marzo del año siguiente, impresa en Madrid. En esta revista colaboró él muy asiduamente con las más variadas producciones, entre ellas la sección Chipi-Chape, firmadas algunas Con seudónimos (El Cuntapeiru fué el más usado).

Falleció Mario Gómez el 26 de abril de 1932 en la villa de nacimiento.

 

Obras publicadas en volumen:

I—Seiscientos sesenta y cinco reclutas: Estudios físico-psiquicos. (Vitoria. 1903: obra recompensada oficialmente).

II.—Recluta y reclutamiento. (Pamplona, 1908: obra declarada de utilidad en el Ejército).

III. —Reclutamiento militar: Estudio histórico. (Manresa, 1909; obra premiada con la Cruz de primera clase del Mérito Militar en 1911).

IV.—De Bogayo: Literatura regional. (Oviedo, 1915).

V.—A Pin el ajustador. (Madrid, 1916; cuentos, poesías, pasos de comedia: obra reeditada en 1919).

VI.—Los siglos de Cangas de Tineo. Primera parte. (Madrid, 1920).

VII.—De corripia. (Madrid, 1923: colección de obritas escénicas en prosa y verso en bable).

VIII.—Los siglos de Cangas de Tineo. Segunda serie. (Madrid, 1925).

 

Trabajos sin formar volumen:

1.—Poesías en bable. (En la antología Los nuevos bablistas, de E. Gra-Rendueles, Gijón, 1925)

2.—De Santavás a Madrid. (En La Maniega, Cangas del Narcea, 1928-29; varios números; UN relato de viaje dialogado en bable, con el seudónimo de El Cuntapeiru).

3.—Rumbos de sierra. (En idem, agosto y octubre de 1928 y julio-agosto de 1929).

4.—Rumbos de Rengos. (En idem, mayo a octubre julio-agosto de 1931).

5.—Rumbos de Luiña. (En idem, enero a abril de 1932).

 

Referencias biográficas:

Astur (Eugenia).—Un escritor asturiano fallecido. (En El Carbayón, Oviedo, mayo de 1932).

Cosmen (Francisco).—Marío Gómez, en el Ejército. (En La Maniega, Cangas del Narcea, julio-agosto de 1932).

Menéndez (J.)—In memorian. (En ídem, ídem).

Payar (El).—Nuestro director ha muerto. (En idem. Idem).