Escritor contemporáneo. Segundo marqués de la Vega e hijo del que antecede; fué su madre doña Julita Fernández de Miranda Y Vives. Nació en Oviedo el 25 de diciembre de 1882.

Siguió los estudios de segunda enseñanza en el Instituto de Oviedo, en el recibió el titulo de bachiller en 1899. Estudio en la Universidad ovetense la carrera de Derecho, licenciándose en 1904. Al año siguiente obtuvo el grado de doctor en la Universidad Central.

Desde los tiempos de estudiante de bachillerato sintió gran afición al cultivo de las letras y publicó trabajos de amena literatura en periódicos regionales, firmándolos algunas veces con el seudónimo de Vicente del Castañedo. También los temas históricos le atraían y llegaron con el tiempo a prevalecer en sus inclinaciones literarias. De esta primera época son la biografía indicada con el número I y la colección de crónicas Ocios de estudiante (número II).

o siéndole necesario por su brillante posición económica el ejercicio de la carrera, se dedicó en las residencias familiares de Oviedo y Grado a sus estudios favoritos, con el solo afán de poseer una extensa cultura, consolidada con frecuentes viajes por España y el extranjero. En enero de 1908 contrajo matrimonio con doña Pilar Herrero Collantes, hija del banquero ovetense don Policarpo.

La vocación literaria tuvo en él por entonces derivaciones a la política. Sobre temas políticos y sociales colaboró abundantemente en periódicos ovetenses Y madrileños, entre éstos, con mayor asiduidad, en El Debate. Militaba en el partido conservador y siguió luego a don Antonio Maura. Le caracterizaba y caracterizó siempre su defensa de las instituciones monárquicas y del catolicismo.

La Monarquía reconoció en diferentes ocasiones sus servicios y méritos. En enero de 1912 le concedió la Encomienda de la Orden de Carlos III. En ese mismo año le fué conferido el título de marqués de la Vega de Anzo, en su calidad de primogénito. En abril de 1913 obtuvo el hábito de la Orden de Montesa y fué armado caballero en el mes de junio, juntamente con sus tres hermanos en la misma ceremonia. Con motivo de su cooperación al XII Centenario de la Batalla de Covadonga en 1918, se le condecoró con la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica. Y por último, en 1924, fué nombrado gentil hombre de Cámara de S. M. con ejercicio.

En Oviedo prestó su colaboración a varias instituciones Al ellas la Cámara de la Propiedad, de la que fué presidente en 1913; estuvo también bajo su presidencia durante algún tiempo la Federación de los Sindicatos Agrícolas de la Diócesis. También desempño desde febrero de 1915 el viceconsulado de Chile. Otras comisiones delegaciones de carácter privado y oficial le llevaron a desarrollar actividades circunstanciales fuera de la provincia y aun en el extranjero, como la representación de la Junta de Protección a la Infancia que llevó al congreso celebrado en Bruselas en 1913. Pero sus mejores desvelos de orden social los recogió la villa de Grado, de la que ha sido en todo momento uno de sus principales benefactores. Especialmente, el Albergue nocturno, la Biblioteca Circulante, etc., le deben aportaciones de consideración.

Con los cuidados de consejero de numerosas empresas mercantiles e industriales ha venido compartiendo actividades de orden social, particularmente benéficas y culturales: el Patronato de Previsión Social de Asturias, del que es presidente; el periódico El Debate, del que es consejero hace muchos años; la revista Acción Española, como uno de sus fundadores; la Sociedad Amigos de Menéndez y Pelayo, de la que desempeña la vicepresidencia; y la Sociedad “Cultura Española” dedicada a editar obras de tendencia tradicionalista.

La escasa apetencia por la publicidad de la propia labor está compensada con el plausible concurso aportado a la divulgación de la obra ajena. Ha prestado su apoyo económico para la publicación de La Catedral de Oviedo (1927), de Justo Alvarez Amandi; el opúsculo La caverna de San Román de Candamo (1930), de Hernández Pacheco; el tomo primero de las obras completas de Juan Vázquez de Mella, Selección de elocuencia e historia (1931); el Almanaque de los Amigos de Menéndez y Pelayo (1932); Historia de España seleccionada en la Obra de Menéndez y Pelayo (1934): y Cómo educa Inglaterra del P. Enrique Herrera (1934).

Obras publicadas en volumen:

I—El general don Pedro Rodríguez de la Buría. Avilés, 1901; (biografía).

II.—Ocios de estudiante. (Barcelona, 1902; crónicas).

III.—Don Pedro Armada Valdés, conde de Canalejas. (Oviedo, 1907?; folleto. Trabajo publicado antes en La Opinión de Asturias, Oviedo, y recogido luego en volumen).

IV.—El -Instituto Nacional de Previsión. (Oviedo, 1910; divulgación).

V.—Un episodio de la historia contemporánea: La concesión del condado de Xauen. (Oviedo, 1930; tres artículos publicados también en Región de Oviedo, y en el Progreso de Asturias, de Avilés)