ESCRITORES Y ARTISTAS ASTURIANOS

ÍNDICE BIO-BIBLIOGRÁFICO

GONZALEZ SOLIS (Protasio).

Periodista de gran actividad y entusiasmo, siempre al ser de cuanto tendiera al enaltecimiento y progreso de Asturias.

Protasio González Solís y Cabal nació en Oviedo el 19 de junio de 1820. De sus primeros estudios se encargó el padre; después cursó Latinidad con el preceptor don Juan Gómez. Seguidamente ingreso en la Universidad en 1841 y estudió en la Facultad de Jurisprudencia, hasta licenciarse en Leyes el 22 de junio de 1849.

Antes de concluidos los estudios, el entonces ministro de Hacienda don Alejandro Mon le concedió un destino de oficial de Contribuciones en la Hacienda de Oviedo. Renunció a esta plaza cuando, terminada la carrera, decidió trasladarse a Madrid. Tres años permaneció en La capital dedicado a prácticas de abogado en un bufete y alternando con esta ocupación el perfeccionamiento de algunas lenguas modernas.

Aunque ninguna noticia concreta poseemos de su iniciación como escritor, cabe suponer que por esta época de su residencia en Madrid, si no antes en los años estudiantiles de Oviedo, comenzaría a dedicase a estos menesteres. Lo cierto es que poco después de su regreso a Oviedo, en abril de 1854, funda bajo su dirección y con el concurso de algunos escritores, entre los que figuraban Juan Llano Ponte, Juan Antonio Uría, José Polledo y el hermano Gumersindo, el bisemanario El Industrial, en la imprenta del padre. Este periódico vivió solamente diecisiete números; acusado de alentar disturbios políticos de carácter reaccionario, el gobernador civil impidió su publicación. Pasado el contratiempo y dentro del mismo año fundó el periódico El Independiente, que se publicaba tres veces por semana: lunes, miércoles y viernes y vió año y medio, hasta el 31 de diciembre de 1855, en cuyo tiempo el director estuvo sujeto a tres procesos, de los cuales salió absuelto.

En mayo de 1856, con la protección económica del marqués de Camposagrado fundó el periódico El Faro Asturiano, que alcanzó larga vida. Convertido en diario a partir del 1 de marzo de 1860, por él desfilaron las plumas asturianas más ilustres de la época y otras no asturianas. (Años después El Faro era considerado como uno de los cuatro más importantes periódicos de provincias, A continuación de El Diario de Barcelona, La Andalucía (sevillano) y El Mercantil Valenciano, por el orden que se indica).

Dejando a un lado la ideología política de Protasio González Solis, la apreciación conjunta de sus actividades periodísticas, examinadas con la perspectiva del tiempo transcurrido, sólo consideración y elogios merece. Entre los más importantes elementos que hayan contribuido en esa época a la prosperidad de Asturias merece puesto relevante. Y es de añadir en honor suyo que no hizo el menor aprovechamiento del ascendiente conseguido con la dirección de tan importante periódico para medro personal. Varias veces se le requirió para presentar su candidatura a diputado a Cortes y otras tantas rehusó el ofrecimiento.

En 1858 fundó el semanario Revista Literaria de Asturias, enviada como obsequio a los suscriptores de El Faro. Los vientos políticos precursores de la revolución de 1868 soplaban cada vez más en dirección opuesta a la seguida por El Faro Asturiano, iniciándose así su decadencia, por lo que Protasio González Solís dejó la dirección a su hermano Gumersindo y en ese mismo año se trasladó a Madrid con el objeto de buscar un medio de vida más holgado.

El que pudo haber ocupado altos empleos con sólo haberlos admitido, llegaba ahora a Madrid a solicitar alguno que le permitiera vivir dignamente. Su antiguo protector Alejandro Mon le proporcionó de momento el cargo de secretario del Gobierno civil de Guadalajara, que desempeñó breve tiempo. porque González Solís prefería permanecer en Madrid, donde aspiraba a seguir su carrera periodística, continuada por entonces con colaboraciones en La Política y otros periódicos.

Quien más pudo favorecerle entonces fué Cayetano Sánchez Bustillo, “que gozaba ya entonces de merecido prestigio en el Ministerio de Hacienda”, como dice el propio González Solís. Le proporcionó un destino cuyo desempeño le obligaba a alejarse de Madrid y que aceptó al fin como solución al problema de su vida. Sirvió a la Hacienda en Zaragoza, La Coruña, Cádiz, Valencia y Cádiz nuevamente, hasta a seguir la emprendida carrera administrativa para fijar su residencia en Madrid.

“Seguí, pues —dice él mismo—. en las criticas circunstancias que atravesaba el país, por algunos años, hasta 1875, desempeñando cargos importantes en el ramo de Hacienda, pero… hube de renunciar mi puesto e insistir en la renuncia, tardando un mes la Gaceta en publicar el decreto admitiéndomela. Después de esto, varias veces a ocasión fácil de volver a la carrera, porque se me ofrecieron cargos superiores; pero mi resolución había sido firme”.

“Mis destinos —continúa— habían tomado otro rumbo: ingresara en el Colegio de Abogados con ejercicio, en la Academia de Jurisprudencia, en la Sociedad Económica y, por otro lado, la prensa periódica me había tendido y hecho caer de nuevo en sus redes. El Parlamento, El Siglo, El Pabellón Español, La Península publicaron multitud de artículos míos sobre materias financieras, principalmente. Examinando un año los presupuestos generales del Estado, capítulo por capítulo, he escrito cuarenta y tres de aquéllos, que formarían un regular volumen”.

Aunque después de esa renuncia le llegaron ofrecimientos tentadores, González Solís no se mostró propicio a variar la actividad adoptada y a las tareas de su bufete de abogado, a las actividades de profesor en la Academia de Jurisprudencia, a las de miembro de la Sociedad Económica Matritense y a las periodísticas, extendidas a otras publicaciones como El Diario Español y la revista Los Dos Mundos, unió el ejercicio de delegado ejecutivo de la Sociedad Unión Ibero Americana desde 1885 hasta 1892, tiempo también en el que corrió a su cargo el Boletín oficial de esa institución. Figuró en esa primera fecha citada entre los fundadores en Madrid del Centro de Asturianos y en la primera Junta directiva de esta agrupación presidida José Posada Herrera.

A esta época corresponden algunos de los trabajos editados en volumen por Protasio González Solís, entre los que sobresale como más meritorio el que formó como un compendio de los periódicos que había dirigido en Oviedo y que dió a la imprenta en 1890 en un tomo en folio con el título de Memorias asturianas, verdadero arsenal de recuerdos de aquella época.

En 1893 se encontraba en Asturias cuando los periódicos le dieron la sorpresa de haber sido nombrado delegado de Hacienda en Gerona, con lo que volvió nuevamente al servicio del Estado. De sus gestiones al frente de esta Delegación escribió una Memoria correspondiente al ejercicio 1893-94. Cada vez mas especializado en materias hacendísticas compuso posteriormente otros trabajos, algunos de los cuales publicó en periódicos y en volumen.

Ya próximo a cumplir los ochenta años se retiró a Oviedo; pocos meses después, en diciembre de 1908, fallecía.

Obras publicadas en volumen:

I.—Unión Ibero-Americana: Memoria presentada por el delegado ejecutivo de la asociación a la Junta general ordinaria celebrada el de enero de 1888. (Madrid, 1888).

II.—Memorias asturianas. (Madrid, 1890; un tomo en folio; resumen de la labor desarrollada en los periódicos ovetenses El Industrial, El Independiente y El Faro Asturiano, dirigidos por el autor).

III.—Memoria leída en la Junta general ordinaria que celebró el 17 de enero de 1892 la Sociedad Unión Ibero-Americana. (Madrid, 1892).

IV.—Avant-propos: Flaquezas de la Hacienda. (Madrid, 1900).

V.—Los Presupuestos del Estado: Reforma que convendría 1ntroducir en su formación. (Madrid, 1904; memoria presentada a la Academia de Ciencias Morales Y Políticas, de Madrid).

 

Obras inéditas:

—Presupuestos generales del Estado en el presente siglo. (MS.).

—…Geografía, Historia y Estadística de los pueblos de Asturias.

Referencias biográficas:

Anónimo.—Ilmo. Sr. D. Protasio González Solís y Cabal. (En la revista Asturias, órgano del Centro de Asturianos, Madrid, mayo de 1897; trabajo reproducido por El Carbayón, Oviedo, 13 de mayo de ese año).

González Solís (Protasio).—Breve reseña de “El Industrial”, “El Independiente” y “El Faro Asturiano”, con la “Revista de Asturias” (En su obra Memorias asturianas, Madrid, 1890).

Redacción (La).—Don Protasio G. Solís. (En Asturias, órgano del Centro Asturiano, Madrid, enero de 1908).