Médico, político y escritor que gozó en Oviedo, donde desarrolló sus actividades en la segunda mitad del siglo XIX, de la estimación y el cariño generales. Aunque su primer apellido es el de González, adoptó los de Longoria Carvajal, por los que fué conocido y con los que pasó al recuerdo de la posterioridad, dando nombre a una de las calles ovetenses. Longoria Carvajal nació en la villa de Grado el 29 de abril de 1827, hijo de don Joaquín González Longoria y Tamargo, abogado y propietario, y de doña María del Rosario Carvajal y Couder.
Después de cursados los estudios elementales y los de Latinidad en la villa de nacimiento, siguió los llamados de Filosofía en la correspondiente Facultad de la Universidad de Oviedo hasta graduarse de bachiller. Se trasladó después a Madrid, donde estudió parte de la carrera de Medicina, que concluyó en la Universidad de Santiago de Compostela. En Madrid desempeñó mientras estudiaba una plaza de practicante, alcanzada por oposición. Después de facultado para el ejercicio profesional se trasladó a Grado, y aquí ocupó durante algún tiempo una plaza de médico titular. Compartió su profesión con algunas actividades de orden político en el campo conservador. Poco después, probablemente en 1854, y residiendo en Oviedo contrajo matrimonio con doña Cesárea López Dóriga de la Dehesa, y en Oviedo transcurrió el resto de su larga vida. No limitó sus conocimientos médicos a la práctica, sino que dió de ellos muestra como escritor, especialmente con frecuentes colaboraciones en la revista profesional El Siglo Médico y otras de Madrid. Ha publicado también, según se dice, algunos trabajos en volumen, entre los que sobresale en mérito uno acerca del cólera morbo, editado por la Diputación provincial y que le conquistó en la Universidad de Filadelfia el título de doctor Honoris Causa. (Tenemos que lamentar no haber podido conocer ninguna de esas obras ni siquiera el dato concreto de título y fecha de impresión).
Acaso más sólido aún que su prestigio como médico fué el conquistado en el campo de la política local. Fué por espacio de diecinueve años concejal del Ayuntamiento ovetense, durante los cuales ejerció durante catorce el cargo de alcalde en tres distintas ocasiones. Fué la primera algo más de un año, hasta la revolución de 1868. Se extendió la segunda desde 1875 hasta bien entrado el año 86. Y la tercera sólo duró dos años: desde el 95 al 97. Como presidente del cabildo municipal ha dejado en los anales de Oviedo el recuerdo ejemplar de un excelente alcalde. Atendió con entusiasmo y celo insuperables tanto al embellecimiento de la población como a su progreso en todos los órdenes.
Su prestigio de médico le dió ingreso como miembro honorario en algunas corporaciones profesionales y por sus actividades políticas el rey Alfonso XII le concedió honores y condecoraciones, entre los que figuran el nombramiento de jefe superior honorario de Administración civil, cruces de segunda clase de la Orden del Mérito Militar y de Beneficencia y la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica. Alfonso XIII le concedió la Medalla de Oro de los Sitios de Zaragoza.
Dejó de existir Longoria Carvajal en Oviedo el 30 de setiembre de 1910.
Referencias biográficas:
Carbayón (Un) [Alejandro Salmeán].—Don José Longoria Carvajal, (En la revista Asturias, órgano del Centro Asturiano, Madrid, noviembre de 1910).