Poeta y prosista en bable y castellano, contemporáneo. Nació en Avilés el 18 de marzo de 1884. hijo de don Baldomero Muñiz a, doña María García Robés, ambos avilesinos, de acomodada posición económica.
Huérfano de padre a los dos años de nacido y de madre a los siete, y único descendiente del matrimonio, vivió bajo la tutela de un pariente hasta la muerte de éste, cuando él andaba por los veinte 0 Bajo la dirección de dicho tutor cursó la primera enseñanza en un colegio religioso de la villa natal y la segunda en Gijón, en el Instituto de Jovellanos, en el que alcanzó el grado de bachiller. Su verdadera vocación no se había perfilado todavía y pareciéndole que el camino era el de las armas, estudió un año en una academia preparatoria de Oviedo. Al siguiente, pasó a la Universidad como alumno con Facultad de Ciencias, por creer que ésta era su ruta. Por fín, aprovechando las asignaturas aprobadas, que coincidían con el preparatorio de la carrera de Medicina, se matriculó en la correspondiente Facultad de la Universidad de Santiago de Compostela, donde cursó el primer año de dicha carrera. Pero inconvenientes de carácter económico e otra índole cerraron el paso a esta última aspiración y tuvo que abandonar los estudios oficiales.
Aficionado desde niño a la lectura pronto comenzó a escribir. El amor, representado en la que después fué su esposa, le sirvió de tema para darse a conocer públicamente como poeta, unas veces en castellano y otras en bable. Sus primeros trabajos poéticos aparecieron en los semanarios locales La Autonomía (1905) y La Verdad (1906-7), con seudónimo de Manín el Floxu.
El 27 de junio de 1907 contrajo matrimonio con doña Candida Miranda Carreño Alonso, de la que quedó viudo con un hijo cuatro años después. Los primeros años de su viudedad, llenos de dolor y de amargura, fueron para él de vida bohemia y desordenada. Deshecha su pequeña fortuna, tuvo que afrontar los problemas cotidianos de la vida por medio del trabajo y se dedicó a la enseñanza privada y al cumplimiento de sus deberes en un puesto de auxiliar en las Oficinas la Junta de Obras del Puerto y Ría de Avilés, cargo que desempeña actualmente (1936).
El escritor continuó produciendo versos en bable y castellano y algunas, pocas veces, trabajos en prosa, pero sin gran fecundidad. Siempre con seudónimos —Manín de la Llosa para las producciones en bable y el anagrama Ziñnum Onibag para los trabajos en castellano. Colaboró en el diario La Voz de Avilés y la revista anual El Bollo, publicaciones ambas avilesinas, y en revistas asturianas de América como Crónica de Asturias, de La Habana, y Heraldo de Asturias, de Buenos Aires.
Sus méritos literarios han tenido reconocimiento en el certamen literario celebrado en Avilés en agosto de 1927, en el que alcanzó uno de los premios con el entremés en bable Manín de Trasona.
