Prosista y poeta contemporáneo, primo de su homónimo Miguel de Palacios Brugueras, reseñado más atrás, nacido en Gijón el 2 de julio de 1857 en hogar de industriales formado por don José María Palacios Rodríguez y doña Salustiana Suarez Álvarez Garaya. Padre de José María Palacios Álvarez, del que se da noticia en páginas anteriores.

Cursó en la villa de nacimiento todos los estudios: los primarios, los de segunda enseñanza en el Instituto de Jovellanos, hasta graduarse de bachiller y los de Comercio en la Escuela de esta especialidad.

Empezó a escribir para el periódico gijonés El Comercio en el mismo año de la fundación de éste (1878), y de él ha continuado siendo colaborador más o menos asiduo, sus crónicas sobre temas históricos acerca de intereses locales y, en los primeros años, sus composiciones poéticas se extendieron después a otras publicaciones regionales: La Opinión, de Gijón (1879-80); La Cruz, de Avilés (1880); El Eco de Asturias, de Oviedo (1880-81).

Estimulado por sus éxitos, especialmente como poeta, en 1883 decidió trasladarse a Madrid a la conquista de un nombre literario. Se dió a conocer en Madrid en la revista El Trovador, fundada en aquel año por él y su citado primo. Colaboró además en El Edén, de la misma capital, y en La Verdad y El Domingo, ambas publicaciones de Guadalajara. Pero la lucha por la conquista de una posición y un nombre en las letras le pareció demasiado dura, por lo que al año, aproximadamente, de residencia en Madrid determinó regresar a la villa natal.

Como medio de existencia decidió dedicarse al comercio, en cuyo ejercicio logró una desahogada posición económica. El 13 de enero de 1886 se casó con doña Marcelina Álvarez y García-Pola.

No abandonó sus aficiones literarias, de las que continuó dando muestra frecuente en prosa y verso en publicaciones asturianas y de fuera de la región; entre ellas las gijonesas La Veleta, Gijón, Grito del Pueblo, El Florete y Boletín de Paz y Caridad; las ovetenses Porvenir de Asturias, El Diario Asturiano, El Carbayón y El Correo de Asturias; El Porvenir de Avilés. y La Voz de Avilés; La Crónica de Gozón, de Luanco, El Cantábrico, de Santander; El Consultor de los Bordados, de Barcelona y El Pueblo Vasco, de Bilbao.

Además de con su nombre ha firmado con diversos seudónimos; el más conocido de todos, el de Paco Isla. Además: Secundino Chozas, Pero Grullo, Un Jovellanista, Un Panero, Miguel de Pepín, P. A, Lacios, Matuterum y Champaca.

Obras publicadas en volumen:

I—Guía ilustrada del viajero en Gijón. (Gijón, 1691: en colaboración con Ricardo Caballero)

Trabajos sin formar volumen:

1.—Prólogo al folleto Recuerdos de un viaje a Roma, de Manuel González Llanos.

2.—Prólogo al libro Retazos, de Miguel Palacios Brugueras. (Madrid, 1892).

3.—Historial de la memoria sobre las aguas de Fuen-Palacios (1905).