Eclesiástico, prosista y poeta contemporáneo, nacido en el lugar de Villainclán, de la parroquia de Villapedre (Navia), el 17 de marzo de 1880, hijo de los modestos labradores don Antonio Pérez González y doña María Pereira Rivas.

Estudió primeras letras en el colegio de San José, de Villapedre. Siguió luego en el mismo colegio los estudios de Latín y Humanidades, aprobó en el Seminario de Mondoñedo (Lugo) en 1898 con calificación de sobresaliente. Como su vocación le inclinaba al sacerdocio, en el mismo seminario empezó a cursar la carrera eclesiástica: tres años de Filosofía y tres de Teología, con nota de sobresaliente en todas las asignaturas. Prosiguió esa carrera con los cursos cuarto y quinto y las mismas calificaciones en el Seminario de Oviedo.

En 1906 se le ordenó de presbítero y en ese mismo año fué nombrado profesor del antes citado colegio de San José, en Villapedre. Con lo que simultaneó las funciones eclesiásticas y las docentes. Prosiguió, además, sus propios estudios teológicos, de los que adquirió los estados de bachiller y licenciado en la Universidad Pontificia de Santiago de Compostela los días 5 y 7 de octubre de 1909, respectivamente.

En 1913 obtuvo mediante oposición la plaza de cura párroco de Villapedre, que continúa desempeñando actualmente (1936), junto con el arciprestazgo de El Franco desde el año 1933. De su labor en Villapedre da idea que, sin el concurso oficial y si solamente con aportaciones voluntarias, haya conseguido construir un edificio escolar y un cementerio y llevado a cabo importantes obras de restauración en la iglesia Parroquial.

De estudiante hizo los primeros ensayos literarios, pero cuando “Empezó su dedicación más asidua a ellos fué después de ordenado. Casi siempre con su nombre y alguna vez con seudónimos como los de Ampere, Pepe y X. y X., ha colaborado con bastante fecundidad en verso y en prosa en numerosas publicaciones, entre ellas: El Carbayón, de Oviedo; Semana Luarquesa, de Luarca; Rio Navia, de esta villa; La Hoja Parroquial, de Vegadeo; La Lectura Dominical, de Madrid, y otras.

De su labor poética ha recogido una selección en el tomo de varios colores, del que dice su prologuista, el también sacerdote José Rodríguez Fernández: “Nuestro autor se ha inspirado, sobre todo, en el dulce y tierno Gabriel y Galán, almas gemelas, y cuyos sentires se fundieron en un solo sentir”.

También ha actuado como conferenciante y predicador.

Obras publicadas en volumen:

I.—De varios colores. (Madrid, 1928; colección de poesías con prólogo de José Rodríguez Fernández).

Il.—Los hechos sobrenaturales. (Pravia, 1933; ensayo).

Referencias biográficas:

Méndez Ron (Gerardo).— Un cura que triunfa. (En El Eco de Navia, 15 de julio de 1930).