Ingeniero de caminos y escritor del siglo XIX, hermano del reseñado anteriormente. Nació en Tapia el 7 de octubre de 1838, hijo de don Andrés Pérez y de doña Teresa Fernández Casariego.

Después de preparado para seguir una carrera se trasladó a Madrid. Aquí, bajo la protección de su tío materno don Fernando Fernández Casariego, filántropo fundador del Instituto de Tapia, cursó los estudios de la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos: en ella alcanzó la plaza de aspirante segundo en noviembre de 1860 y concluyó los estudios teóricos en 1862. En este mismo año se le destinó al distrito de Cuenca a ejercicios de prácticas.

Concluida la carrera con esos ejercicios, pasó en noviembre de 1862 a la categoría de ingeniero segundo, con la que en enero siguiente se le destinó a prestar servicio al distrito de Oviedo.

Desde entonces residió casi constantemente en la tierra natal, en Oviedo y en Tapia, y contrajo matrimonio en esta villa con doña Concha Terrero Estrada.

Ascendido a la categoría de ingeniero primero en 1863, ocupó entonces interinamente la Jefatura de ese distrito, En 1867 se le destinó al servicio marítimo del mismo; entre los trabajos desarrollados entonces figura la dirección del puerto de Tapia desde marzo del 69.

En setiembre de 1871 se le envió a prestar servicio en comisión al distrito de Orense, pero la orden quedó sin efecto y continuó en Asturias. Cinco años después, en diciembre de 1876, fué destinado a León, Y a ese distrito perteneció hasta julio del 78, en que se le encargó con carácter de interino de la Jefatura de Oviedo. Al ascender a ingeniero jefe de segunda clase el 19 de octubre de 1878 se le confirió con esa misma fecha tal cargo en propiedad. En él recibió la categoría de ingeniero jefe de primera clase y de jefe de Administración de tercera el 18 de julio de 1889. Algunos años después, delicado de salud, solicitó la jubilación el 3 de abril de 1899; le fué concedida en agosto de ese mismo año con más de treinta y ocho de servicios al Estado. Poco disfruté de este descanso, porque dejé de existir el 12 de octubre de dicho año 1899.

Con las ocupaciones profesionales alterné dedicaciones de escritor en algunos periódicos regionales, especialmente El Carbayón, de Oviedo.

Trabajos sin formar volumen:

1.—Plan de caminos vecinales de Asturias. (En el diario El Carbayón, Oviedo, 1893).

Referencias biográficas:

Anonimo.—Una necrologia. (En El Carbayón, Oviedo, 13 de octubre de 1899).