Uno de los escritores contemporáneos más fecundos, culto buceador de la Historia y la Filosofía, enamorado de lo tradicional, de ideología católica, de lírica pluma. Historiador, novelista y poeta. También músico. “Alguien ha escrito que Sandoval —dice el P. Félix García es un romántico rezagado; así, es, en efecto; por su figura cervantina y soñadora, caballeresca, espiritual, fina; por el vuelo de su pensamiento, por su enorme cultura, que abarca todas las disciplinas y géneros literarios; por su hondo sentimiento de la vida y de las cosas, y por irrefrenable atracción que siente hacia lo pasado, que tiene aliento vital y sugiere tantas cosas al despierto espíritu de Sandoval; pero sin perder el sentido de la realidad presente”.

Nació Adolfo Sandoval en Oviedo el 5 de julio de 1860, aunque en la Enciclopedia Espasa se anota, probablemente por errata, el año 1870. De esta fecha data su ingreso en el Instituto de segunda enseñanza en la ciudad de nacimiento, en el que Cursó brillantemente los estudios de bachillerato hasta graduarse el 16 de junio de 1876 con nota de sobresaliente. Luego emprendió en la Universidad la carrera de Derecho en la Facultad correspondiente, en la que sólo estudió cuatro cursos, también con las más altas calificaciones. Probablemente concluyó esa carrera en la Universidad Central, de Madrid, en la que estudió también, al parecer, la carrera de Filosofía y Letras. Además cursó los estudios preparatorios del Cuerpo de Archiveros, Bibliotecarios y Anticuarios.

De sus años estudiantiles como alumno de la Universidad ovetense data su iniciación de escritor en colaboraciones prestadas a algunos periódicos locales. También se dió a conocer como orador, particularmente en controversias sostenidas en el Ateneo. De ambas manifestaciones intelectuales continuó después en Madrid dando frutos reveladores de un espíritu cultivado y temperamento lírico,

Con los estudios universitarios en Madrid alternó los de músico, que era otra de sus más hondas vocaciones. Fué discípulo de Vázquez y Zubiarre, y amplió luego estos estudios en París con Saint-Saéns, del que acabó de adquirir la maestría como concertista de piano, facultad en la que conquistó éxitos resonantes. No se ha limitado en esto a mero intérprete, sino que ha producido también obra original, en la que figuran una composición para piano, violín y violoncelo; el poema sinfónico A Avila, muy aplaudido, y otras piezas de concierto.

Desconocemos si ha desarrollado actividades profesionales en alguna de las carreras que había cursado. Las únicas que nos son conocidas, las literarias. Las desarrolló en Madrid en diferentes publicaciones, entre las que figuran en primer término, cronológicamente, Revista de Madrid y Revista Contemporánea. Después ha figurado su pluma entre los colaboradores de las principales revistas ilustradas y algunos periódicos. También se desenvolvió como orador en instituciones de ideología católica. en una de las cuales desarrolló un cursillo de conferencias sobre el Renacimiento, que mereció grandes elogios de la crítica.

Al estudio y la investigación constantes ha unido la cultura acopiada en numerosos viajes por diversos países europeos. España le es conocida de un extremo a otro.

Sus primeros años de publicista los caracteriza Un predominio en los temas de investigación histórica que, nunca abandonada por completo. fué derivando luego principalmente hacia la novela. Esas y otras Manifestaciones, entre ellas la de poeta, le fueron dando temas para escribir más de una treintena de volúmenes. Algunas de las novelas que figuran entre ellos han sido premiadas por la Biblioteca Patria y Publicadas por ella,

Sus méritos literarios han sido reconocidos por algunas corporaciones con la incorporación a su seno, como la Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas, de Toledo. El Ayuntamiento de Avila le ha dedicado una calle en reconocimiento de haber situado el escenario de una de sus novelas en esa ciudad. En 1929 la Sociedad Cervantina le ha conferido el título de presidente de honor.

Contrajo matrimonio con doña Elena Oleo. sobrina del famoso historiador y crítico José María Cuadrado.

 

Obras publicadas en volumen:

I.—Estudios críticos de la Edad Media. (Madrid, 1889).

1.—Catalina de Siena y su tiempo. (Madrid, 1888-90; dos tomos).

III.—El Centenario de los impíos. (Madrid, 1889).

IV.—Estado actual de la cuestión romana: ¿Debe el Papa permanecer en Roma? (Madrid. 1890).

V.—Historia de San Antonio de Padua y su tiempo, (Madrid, 1892).

VI.—El siglo XHI. (Madrid).

VII.—_El brazo de la raza. (Madrid).

VIII.—El Centenario de la Revolución francesa. (Madrid).

IX.—El Pontífice romano. (Madrid).

X.—La definición de un dogma. (Madrid).

XI.—Páginas de historia de Italia en el siglo XIV. (Madrid).

XII.—Savoranola y su tiempo. (Madrid; 3 tomos). !

XIII.—Paisajes espirituales. (Madrid, 1916).

XIV.—A la sombra de la Catedral. Nuevos paisajes espirituales.(Madrid, 1917).

XV.—El libro de los recuerdos. (Madrid, 1918).

XVI.—Ante todo lo amado. (Madrid, 1918).

XVII.—La gran reveladora. (Madrid, 1919).

XVIII.—Rayo de luna. (Madrid, 1919).

XIX.—Importancia y trascendencia de la Cinematografía en todos los órdenes. (Madrid).

XX.—Toda hermosa. (Madrid, s. a., 1926; novela premiada y publicada por Biblioteca Patria).

XXI.—Angeles caidos. (idem).

XXIII—Los amores de un cadete artillero. (Madrid, 1927; ídem).

XXIII.—Fuencisla Moyano. (Madrid, 1928: ídem).

XXIV.—Forjador de almas. (Madrid, 1929: ídem).

XXV.—Una historia de amor. Beatriz Pacheco. (Barcelona, 1929; idem).

XXVI.—El corazón de un estudiante. (Madrid. 1929; idem).

XXVII.—Almas gemelas. (Barcelona, 1930; ídem).

XXVIII.—El pobrecillo de Asís. Estudio histórico-social. (Madrid, 1930).

XXIX.—España: Norte y Levante. Acuarelas de Marins HubertRubert. (Barcelona, 1931).

XXX.—Las supremas revelaciones de la vida. (Madrid, 1932; estudio).

XXXI—Los bellos países: España. (Madrid, 1932; viajes).

XXXII.—La gran fascinadora. (Madrid, 1932; novela).

XXXIII—E! hombre que necesita España: Ensayo político-social. (Madrid, 1934).

XXXIV.—La señorita de Altamira. (Barcelona, 1934; novela en la colección La Novela Rosa).

XXXV.—¡Ahí va un corazón! (Madrid, 1934: poesías).

XXXVI. —Trascendencia altísima de la misión del clero rural astur en la actual hora, y asistencias que deben prestársele. (Madrid, 1936).

 

Referencias biográficas:

García (Fr. Félix).—Adolfo de Sandoval. (En la revista Religión y Cultura, Madrid. 1935: trabajo reproducido por el Diario Palentino, 10 de enero de 1936).