Catedrático y escritor que brilló en los postreros anos del siglo XVIII y primeros del siguiente. Hombre acreditado de docto en diversos conocimientos literarios y científicos, y asimismo como latinista al punto de escribir en latín con extraordinaria elegancia. Pero no menos que sus méritos intelectuales ha contribuido a mantener su recuerdo vivo en la posteridad la participación tomada en el alzamiento nacional iniciado en Asturias contra la invasión francesa de 1808 y sucesos políticos derivados de esa gesta.

Andrés Angel de la Vega Infanzón (al que Canella y Secades trastrueca nombre y apellidos ( Ángel Vega Andrés) en Historia de la Universidad de Oviedo, es hermano del que va reseñado a continuación, y nació en la aldea de Sueiro (El Franco) en el año 1768, hijo de don Fernando y doña María de aquellos apellidos respectivos. A los once años de edad (1779) se trasladó a Oviedo e ingresó en la Facultad de Filosofía de la Universidad, en la que hizo los estudios de Segunda enseñanza hasta alcanzar el grado de bachiller en 1783. Siguió luego los de Leyes y Cánones, en los que obtuvo el mismo grado en 1788 y concluyó la carrera universitaria con los títulos de licenciado

Y doclor en Derecho canónico, que le fueron concedidos, respectivamente, el 12 de junio de 1892 y el 19 de julio del año siguiente.

El aprovechamiento con que cursó los estudios queda certificado con el hecho de que desde antes de concluirlos haya ejercido en la Universidad de profesor sustituto. Lo fue de varias asignaturas, entre ellas de Instituciones civiles, Matemáticas y Prima de Cánones, con lo que ya comenzó su crédito de educador. En 1796 obtuvo en propiedad mediante oposición la cátedra de Regencia de Leyes, que tuvo a su cuidado cerca de tres lustros. Fue también presidente y director de la Academia de Derecho que funcionaba en la misma Universidad.

Desde que concluyó la carrera se estableció como jurisconsulto en Oviedo incorporado al Colegio de Abogados de la misma ciudad. A sus actividades docentes y forenses asoció actuaciones brillantes en la vida pública, que ya le llevaron en 1792 a figurar como vocal en la Junta General del Principado, representación que entonces ostentó hasta 1794. Fue además procurador y juez primero noble. Todo ello le fue dando una creciente reputación en los centros intelectuales ovetenses y en 1801 la Sociedad Económica de Amigos del País le admitió como individuo de número, y en ella se le elevó al cargo de segundo secretario.

Al sobrevenir la invasión francesa en mayo de 1808, Vega Infanzón fué de las personalidades asturianas que se aprestaron con sus mejores entusiasmos a organizar la defensa nacional. Formó con el conde de Toreno, por designación de la Junta General del Principado,  la embajada enviada por ésta a Inglaterra en petición de auxilios contra las huestes napoleónicas. Al año siguiente desempeñó el cargo de secretario de la Junta Superior de Armamento y Defensa de Asturias, establecido por el general marqués de la Romana, cuando disolvió la Junta General.

Algo después fué uno de los diputados asturianos a las Cortes Constituyentes reunidas en Cádiz. En ellas no brilló como orador, pero prestó valiosos servicios de asesoramiento en las Comisiones parlamentarias y gozó de prestigio y consideraciones generales. A su cargo corrió la redacción del Reglamento que estableció las funciones en comendadas a la Regencia llamada El Quíntillo.

Víctima de la epidemia de fiebre amarilla que se declaro entonces en esa comarca, falleció en la isla gaditana el 14 de octubre de 1813.

De sus al parecer abundantes producciones de escritor, han desaparecido, manuscritas y acaso también impresas, las pocas muestras . Sólo han llegado a nosotros las dos que siguen.

Obras publicadas en volumen.

I.-Reglamenzo de la Regencia.

Trabajos sin formar volumen :

1.-Oración… (Incluida en la obra Relación de los públicos festejos con que la Real Universidad Literaria de Oviedo celebró la feliz elevación de su hijo el Excmo, Sr, D. Gaspar Melchor de Jovellanos a la Secretaría de Estado y del Despacho universal de Gracia y Justicia de España en Indias, Oviedo, 1790).